A finales de enero del 2025 la noticia
es que el Departamento de Educación de la Generalitat de Catalunya ha planteado
la creación de un grupo de expertos para valorar la propuesta de prohibir totalmente
el uso del móvil entre el alumnado de primaria y secundaria en los centros
educativos durante el horario lectivo.
Me dirijo hacia mi puesto de trabajo un miércoles cualquiera, concretamente a un Instituto de secundaria. Antes de salir he consultado la meteo desde el móvil para decidirme por una u otra chaqueta más o menos abrigada. Son apenas las 8 cuando valido mi acceso al trasporte público con mi móvil. Siempre me pongo música para empezar con buen ánimo y activo la conexión a internet desde el móvil. Mientras llega el metro, empiezo a consultar los e-mails y wasaps nuevos y contesto aquellos que lo requieren, con mi móvil. Tal y como indica la aplicación de TMB, descargada en mi móvil, no hay demasiada gente y el próximo tren llega en unos breves minutos sin incidencia. En el vagón observo que el 90% de la gente está haciendo lo mismo que yo: mirar el móvil. Me pregunto si como yo, ya están trabajando o simplemente están consumiendo información, o desinformación, en sus múltiples facetas: videos, noticias, shopwebs…
Yo hoy tengo una idea y un proyecto distinto. Así que al mismo tiempo que sigo mis rutinas, voy haciendo tomas de vídeo con mi móvil procurando sobremanera respetar la privacidad de las personas con las que me encuentro. Llego al instituto, en la entrada destaca el aviso de prohibido móviles, y me dirijo a la primera reunión del día. Curiosamente ninguna de mis compañeras orientadoras tiene el móvil en la mesa. Les pido permiso para hacer una toma de vídeo. Durante la valoración de un caso urgente no tenemos más remedio que llamar, también con mi móvil, a mi compañera trabajadora social para que nos asesore.
Finalizada la reunión hago una primera sesión de evaluación psicopedagógica con un alumno de ESO. Gracias a mi móvil tengo conexión a internet, porque la verdad es que los sistemas del departamento no siempre funcionan correctamente. Eso me permite descargar el test que voy a utilizar hoy. Después del test me tomo cinco escasos minutos para tomarme un café que pago con mi móvil, y subo de nuevo a realizar una segunda valoración. Hoy no he recibido demasiadas llamadas, pero alguna que otra ha habido. La última ha sido justo a la hora de acabar la jornada… esta es otra: no uso relojes desde que utilizo móviles, ya hace más de 25 años.
Vuelvo a casa y en el metro comienzo a editar las tomas de video que
he ido grabando. Así que en casa solo tengo que hacer algunos retoques desde el
PC. Me gusta el resultado: refleja un día estresante a los que ya estoy
acostumbrado, y las imágenes quizás pueden ayudar a la reflexión y abrir debate sobre el por qué de
la prohibición. Pero me falta la música. Utilizo una aplicación de IA para
crear mi primera canción. Unos cuantos prompts, algunos ensayos que descarto y
ya la tengo y me encanta!. He hecho mi primera canción mediante IA con mi móvil. Solo falta
una foto de portada… la genero en un momento con mi móvil y la ayuda de una aplicación
de IA y me encuentro con un grupo de adolescentes sonrientes trabajando de
forma cooperativa en un proyecto en el aula. Genial.
Así que mis preguntas son: ¿realmente
tenemos que prohibir el uso del móvil en los centros escolares?. ¿A quien beneficia
no enseñar a utilizar positivamente el móvil? ¿Seríamos capaces de proponer una
alternativa educativa a esta prohibición?
Para responder a estar preguntas, quizás te interese leer primero el Informe GEM 23 de la UNESCO. Yo le he pedido a GEMINI que me lo localice... desde mi móvil.
El debate queda abierto. Te invito a ver y compartir el vídeo y este artículo... Gracias por tu tiempo y tu visita!